29 años y seis días después de su conversión al catolicismo, Max Jacob fue apresado por judío y murió de neumonía en un campo de concentración cercano a París nueve días más tarde
![]() |
Max Jacob |
Versovia.com / 01·02·2015
Max Jacob nació en Quimper, Bretaña, el 11 de julio de 1876, en el seno de una humilde familia judía: su padre era sastre. Al terminar sus estudios secundarios se instaló en París donde realizó los más variados oficios: desde barrer almacenes hasta astrólogo, profesor de piano, pintor o crítico de arte.
A partir de 1901, entabló una estrecha amistad con André Salmon, Guillaume Apollinaire y Pablo Picasso con los que compartió su vida en Montmartre, en el hoy célebre Bateau-Lavoir. Fue muy cerca de éste último, en la rue Ravignan, donde tuvo lugar uno de los acontecimientos claves de su vida: la aparición de Cristo en su habitación el 7 de octubre de 1909. Fue el comienzo de un largo camino hacia la conversión al catolicismo: el 18 de febrero de 1915 fue bautizado en Notre-Dame de Sion, con Picasso como padrino.
Ya en 1911 había publicado, gracias al mecenazgo de Picasso, el primero de sus grandes libros: "Las obras burlescas y místicas de San Matorel, muerto en el convento de Barcelona". En 1917, publicó uno de los pincipales libros de la vanguardia poética de la primera mitad del siglo XX: Le cornet à dés, libro que lo consagró como un maestro del poema en prosa.
En 1921 se instaló en Saint-Benoît sur Loire, cerca de la célebre abadía benedictina. A partir de entonces, su vida estuvo ritmada por breves escapadas a París, una intensa vida espiritual en compañía de los monjes benedictinos, algunos viajes al extranjero, por España e Italia, y la prosecución de su obra, mientras vivía modestamente de la venta de sus acuarelas.
El 24 de febrero de 1944 fue arrestado por la Gestapo y conducido al campo de concentración de Drancy, en las cercanías de París. A pesar de los esfuerzos de sus numerosos amigos para que fuese liberado, murió allí de una neumonía el 5 de marzo de 1944, "víctima de una barbarie que vio solamente en ese cristiano por iluminación al judío denostado que era por nacimiento" (Michel Leiris).
Oración
Permitid, Señor,
un poco de lujuria en este mundo.
Permitid que el roce de los labios
Max Jacob nació en Quimper, Bretaña, el 11 de julio de 1876, en el seno de una humilde familia judía: su padre era sastre. Al terminar sus estudios secundarios se instaló en París donde realizó los más variados oficios: desde barrer almacenes hasta astrólogo, profesor de piano, pintor o crítico de arte.
A partir de 1901, entabló una estrecha amistad con André Salmon, Guillaume Apollinaire y Pablo Picasso con los que compartió su vida en Montmartre, en el hoy célebre Bateau-Lavoir. Fue muy cerca de éste último, en la rue Ravignan, donde tuvo lugar uno de los acontecimientos claves de su vida: la aparición de Cristo en su habitación el 7 de octubre de 1909. Fue el comienzo de un largo camino hacia la conversión al catolicismo: el 18 de febrero de 1915 fue bautizado en Notre-Dame de Sion, con Picasso como padrino.
Ya en 1911 había publicado, gracias al mecenazgo de Picasso, el primero de sus grandes libros: "Las obras burlescas y místicas de San Matorel, muerto en el convento de Barcelona". En 1917, publicó uno de los pincipales libros de la vanguardia poética de la primera mitad del siglo XX: Le cornet à dés, libro que lo consagró como un maestro del poema en prosa.
En 1921 se instaló en Saint-Benoît sur Loire, cerca de la célebre abadía benedictina. A partir de entonces, su vida estuvo ritmada por breves escapadas a París, una intensa vida espiritual en compañía de los monjes benedictinos, algunos viajes al extranjero, por España e Italia, y la prosecución de su obra, mientras vivía modestamente de la venta de sus acuarelas.
El 24 de febrero de 1944 fue arrestado por la Gestapo y conducido al campo de concentración de Drancy, en las cercanías de París. A pesar de los esfuerzos de sus numerosos amigos para que fuese liberado, murió allí de una neumonía el 5 de marzo de 1944, "víctima de una barbarie que vio solamente en ese cristiano por iluminación al judío denostado que era por nacimiento" (Michel Leiris).
Oración
Permitid, Señor,
un poco de lujuria en este mundo.
Permitid que el roce de los labios
sea caliente
levadura,
permitid que las pupilas de luto del deseo
se hundan en el pozo de otros ojos,
permitid que la mano del osado amante
palpe la sangre ajena estremecida.
Dejad hervir las entrañas de los machos
sobre la piel desnuda,
dejad el juego de los adolescentes labios
bucear en los senos de los lirios,
dejad las vírgenes con su secreto fuego
ardiendo en piras escondidas,
dejad los muslos de los verdes tallos
mezclarse en llamas de tacto,
en apretadas lianas de caricias.
Que el rubor se desnude enteramente
y la escultura surja de tactos y torrentes,
que los zumos de los ojos exprimidos y de brazos,
mane de fuentes secretas y de labios.
Permitidlo, Señor,
que ya sufren sus penas los humanos,
que ya, bastante,
la carga duró sobre sus hombros.
permitid que las pupilas de luto del deseo
se hundan en el pozo de otros ojos,
permitid que la mano del osado amante
palpe la sangre ajena estremecida.
Dejad hervir las entrañas de los machos
sobre la piel desnuda,
dejad el juego de los adolescentes labios
bucear en los senos de los lirios,
dejad las vírgenes con su secreto fuego
ardiendo en piras escondidas,
dejad los muslos de los verdes tallos
mezclarse en llamas de tacto,
en apretadas lianas de caricias.
Que el rubor se desnude enteramente
y la escultura surja de tactos y torrentes,
que los zumos de los ojos exprimidos y de brazos,
mane de fuentes secretas y de labios.
Permitidlo, Señor,
que ya sufren sus penas los humanos,
que ya, bastante,
la carga duró sobre sus hombros.
No hay comentarios :
Publicar un comentario